¿Consideras que un bailarín, un pintor o un escultor se encuentran al mismo nivel que alguien que vive de torturar y matar animales? Pues en España hay quien considera que asesinar toros y otros animales en el ruedo es una digna expresión de las Bellas Artes, ¿qué opinas al respecto?
Hay quienes en imágenes como ésta ven una expresión artística que merece ser premiada. Fotografía: TiempoAnimal
¿Qué viene a tu mente cuando se menciona las bellas artes? Quizá sea un concierto, la pintura o el canto, sin embargo en España parecen tener otra idea al respecto, pues el Ministerio de Cultura de ese país eligió conceder la Medalla de Oro al mérito en las Bellas Artes a un torero. Este premio se otorga normalmente a personas o instituciones que destaquen en el campo de la creación artística y cultural; o bien hayan prestado servicios notorios en el fomento, desarrollo o difusión del arte, la cultura o en la conservación del patrimonio artístico. Desde hace décadas, diversas disciplinas se han llevado dicha presea, desde escritores, poetas, coreógrafos, músicos, hasta diseñadores de moda y arquitectos. Sin embargo en esta ocasión se optó por reconocer a Julián López,“El Juli”.
Es claro que del mundo taurino se han derivado algunas expresiones artísticas, como ocurre con ciertas obras musicales como el pasodoble para acompañar las faenas del matador, o las coplas surgidas entre artistas y toreros para deleite de algunos.
También de ese mundo han surgido creaciones artísticas que critican ferozmente la tortura de animales no humanos y el riesgo que supone para los humanos involucrados. El pintor Goya utilizó su talento para protestar contra la barbarie del “toreo” y sus más reconocidos grabados retratan esa realidad monstruosa y violenta, aunque por muchos años los taurinos no muy cultos, han intentado apropiarse de su obra.
De lo anterior podemos apreciar que la tauromaquia siempre ha generado material artístico, ya sea por parte de quienes la apoyan o de quienes la critican, siendo objeto de su creación el ambiente que la rodea, la persona que participa e incluso los vestuarios, pero nunca la muerte del toro ha sido su foco. Es aquí donde las corridas de toros enfrentan un dilema ético insorteable, cualquier manifestación humana puede ser considerada “arte” si cumple con ciertos patrones estéticos, pero no todo arte es “ético” o positivo.
En efecto, hay quien puede ver lo artístico hasta en la peor atrocidad sin importarle si es ético o perdurable. En el caso de los eventos taurinos sucede lo mismo, lo que ocurre en realidad es que se tortura y mata a animales herbívoros pacíficos, un acto injustificable y que sería un delito si se cometiera en contra de un perro o un gato. Sin embargo, los taurinos, amparados en excepciones legales, pueden cometer actos que serían penados con cárcel si fueran dirigidos a especies diferentes a los toros, lo cual es, además de incongruente, carente de toda ética.
Es por lo anterior que distinguir a ‘El Juli’ por su larga carrera en tortura y asesinato de animales es una ofensa a la creación artística que debe ser protegida y perdurar, ya que se premia a alguien que se dedica a una actividad carente de ética y que además es rechazada por la enorme mayoría de los españoles.
El Juli, en su faceta artísitca. Fotografía: TercerEquipo
Desde ANIMAL HEROES te invitamos a apoyar siempre aquellas expresiones artísticas que busquen construir en lugar de destruir, aquellas que busquen el bienestar animal y una evolución social. Rechaza toda expresión de violencia animal, desde tu plato y tu ropa hasta tu forma de entretenimiento, tú eres el factor de cambio que el mundo necesita.
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