México es uno de los países con mayor biodiversidad del planeta, sin embargo el comercio ilícito de nuestra vida silvestre está amenazando los ecosistemas. ¿Sabías que más del 70% de pericos capturados de manera ilegal mueren antes de ser vendidos? ¡Acabemos con este problema!
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El tráfico ilegal de vida silvestre es un problema que pone en riesgo no sólo a la flora y fauna de nuestro país y del mundo, sino también a la seguridad nacional e internacional, afectando al desarrollo social y económico.
Por tráfico ilegal nos referimos a la extracción, acopio, transporte, comercialización y posesión de especies silvestres, mediante la captura, caza y colecta. Esta actividad está penada en la legislación ambiental del país como delito. La erradicación del tráfico ilegal de especies es un gran reto para México, ya que esta actividad mueve cantidades considerables de dinero, y su mercado tiene clientes de considerable influencia económica.
El tráfico ilegal se asocia a mantener un estatus social relacionado con el objeto de tráfico, y a las creencias en el poder curativo que plantas y animales puedan tener.
El tráfico ilegal de vida silvestre cobra un precio altísimo a los ecosistemas y sus especies, sus consecuencias negativas pueden observarse a distintos niveles: organismo, especie y ecosistema. Te damos algunos ejemplos de ello:
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- Los psitácidos que comúnmente conocemos como pericos, son uno de los organismos que más se ven afectados por el tráfico ilegal, el 77% de los pericos capturados muere antes de llegar al consumidor; se estima que entre 50 y 60 mil animales mueren anualmente.
- El pez Totoaba es otro organismo afectado por el tráfico ilegal, pues en el mercado asiático se cree que su vejiga es de alto valor medicinal. El pez Totoaba está listado bajo la categoría de peligro de extinción, y recordemos que su pesca ha orillado al borde de la extinción a la vaquita marina.
- El jaguar es una de las especies amenazadas por el aprovechamiento ilegal de su piel, lo que representa la primera causa de mortalidad de esta especie en nuestro país.
- La selva Lacandona es un ecosistema protegido, pero el tráfico ilegal de su vida silvestre ha originado una defaunación que la pone en riesgo de subsistir, pues aproximadamente 100 mil animales silvestres se extraen cada año.
Fotografía: 90 Grados
Atender el desafío y acabar con el tráfico ilegal de especies silvestres, requiere de esfuerzos conjuntos entre todos: gobierno, asociaciones civiles y ciudadanía.
Ayuda a los animales y sus ecosistemas, rechaza la adquisición de estos animales y denuncia ante la PROFEPA cualquier caso de extracción, transporte o venta de animales silvestres del que seas testigo. Puedes hacerlo en línea, por teléfono o vía correo electrónico, encuentra todos los datos en: https://www.gob.mx/profepa/articulos/como-realizar-una-denuncia-ante-profepa?idiom=es ¡Sé un héroe para los animales!
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