Gabs Blanquet¿Será nuestra última oportunidad para salvar a la vaquita marina de desaparecer?
La vaquita marina es considerada la marsopa más pequeña del mundo, cuyo único hábitat en el planeta es el Golfo de California, lo que la convierte en una especie endémica de México. De ahí, los enormes esfuerzos para lograr preservar la especie. Su nombre científico es phoconea sinus y pertenece al orden de los cetáceos. Curiosamente, su hallazgo científico se realizó en 1958. Por lo general, mide 1.50 metros de longitud y puede llegar a pesar hasta 50 kilos. Su dieta se compone de calamares, peces y camarones que abundan en la región.
En la actualidad, la vaquita marina se encuentra en crítico peligro de extinción debido a la pesca ilegal y a que las medidas que se tomaron para tratar de protegerla fueron insuficientes. De acuerdo al Comité Internacional para la Recuperación de la Vaquita Marina (CIRVA) sólo quedan 10 ejemplares de este mamífero marino. Como se mencionó antes, una de las principales causas de la extinción de la vaquita marina es la pesca ilegal de la totoaba, que de igual forma, se encuentra en peligro de desaparecer. Ambas especies comparten el mismo hábitat, aunado a esto, la vaquita marina queda atrapada en las redes de enmalle que capturan a las totoabas, y por consecuencia, muere asfixiada al no poder salir a la superficie a tomar aire.
Cabe mencionar que desde la década de los 90’s se implementaron diversas estrategias para la protección y preservación de la vaquita marina, sin alcanzar el éxito esperado. No obstante, el 24 de septiembre de 2020 una serie de regulaciones se publicaron en el Diario Oficial de la Federación, las cuales decretan fundamentalmente la prohibición de redes agalleras, horarios específicos para pescar y el cierre total o parcial de la zona donde se encuentra la vaquita marina. Este decreto entraría en vigor el 10 de julio del presente año, sin embargo; el 15 de julio de 2021 el gobierno mexicano decidió abandonar oficialmente el plan político que mantiene libre de pesca el área donde residen las últimas vaquitas marinas, denominada zona cero tolerancia.
La SEMARNAT justificó la reducción de la zona protegida manifestando que ha habido un descenso en el número de ejemplares de esta especie, así como una disminución en el tamaño del área donde han sido vistos en los últimos años. La realidad a la que se enfrenta la vaquita marina es desfavorable, ya que las autoridades mexicanas han desistido de proteger a uno de los cetáceos más amenazados en la Tierra, a pesar de las acciones efectuadas para cuidarla, tanto por organismos nacionales e internacionales, como por ambientalistas.
Lamentamos que no se hayan hecho esfuerzos suficientes y efectivos por intentar salvar a la Vaquita Marina hasta las últimas consecuencias.
En ANIMAL HEROES te invitamos a leer y a compartir esta información con amigos y familiares y así, continuar celebrando a uno de los animales más emblemáticos de los mares mexicanos.
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