Olivia EscobarLos perros son parte de la vida cotidiana, ya sea porque tengas uno a tu cuidado o conozcas a un tutor de estos animales, y aunque normalmente suelen llegar a ser como parte de la familia, no podemos olvidar a aquellos perros confinados a vivir en azoteas o amarrados en patios. Conoce cómo es la vida de estos seres y difunde las recomendaciones de expertos entre tus conocidos para acabar con esta forma de maltrato.
Según el INEGI en México el 85% de los animales de compañía son caninos; desde la antigüedad el hombre ha nombrado al perro como “su mejor amigo” sin embargo es común también verlos encadenados o confinados en azoteas o patios, y surge la pregunta ¿acaso esos perros viven en eterno aislamiento?
La adiestradora y psicóloga Linda Michaels explica que las necesidades básicas de los perros van más allá de tener agua y comida, ella divide los requerimientos de los caninos en biológicos o físicos y emocionales.
Los perros confinados a azoteas están desprovistos de la atención y cuidados necesarios.
Entre las necesidades físicas podemos destacar el ejercicio y su espacio de descanso. Todos los perros necesitan ejercitarse con regularidad, se recomienda que los de talla pequeña tengan paseos diarios de media hora, mientras que los de talla mediana y grande deben durar entre una y dos horas.
Asimismo los perros deben contar con actividades que estimulen su mente pues de lo contrario surgen problemas de comportamiento. La doctora Karen Becker afirma que además de ser más propensos a obesidad, diabetes, artritis, afecciones a músculos, huesos, articulaciones e incluso órganos internos, los perros que no se ejercitan presentan problemas de socialización con otros animales y personas, tienden a masticar objetos inadecuados, hurgar en la basura, padecer estrés, aburrimiento y ansiedad.
Referente al espacio destinado para que el perro pase la mayor parte de su tiempo todos los expertos coinciden en que debe ser un sitio que le proteja de la intemperie, es decir, no deben vivir en una azotea o patio en donde están expuestos a las inclemencias del clima, tampoco deben permanecer encadenados, ya que limitar su movilidad y espacio es cruel y en consecuencia el perro tiende a ser ansioso, agresivo y destructivo.
Los perros son seres vivos con necesidades biológicas y afectivas. Su lugar no es en las azoteas. Fotografía: NTV
La emergencia sanitaria que hemos vivido en los últimos meses debe ser una invitación a la reflexión sobre cómo tratamos a los perros en la “vida normal”. Desde ANIMAL HEROES te invitamos a evaluar la calidad de vida que le proporcionas a quienes te brindan su afecto incondicional, pregúntate ¿mi perro está condenado al confinamiento y aburrimiento? ¿Por qué alguien encadenaría a quien ama? Si debes enmendar algo hazlo, si todo está bien entonces educa y sensibiliza a los que te rodean.
Alimentación, ejercicio, cuidados veterinarios y un trato digno son necesidades que hay que considerar para asumir la tutela de un perro. Fotografía: La Gaceta 100
Así que ya lo sabes, un perro necesita seguridad, amor y respeto, al igual que alimento, agua, atención veterinaria, aseo, ejercicio y contar con un espacio con condiciones ambientales que le permitan vivir sin poner en peligro su salud. Si conoces de un perro que sea maltratado y se encuentre su vida en peligro, denuncia antes las autoridades de tu localidad.
Finalmente, otra forma de promover el bienestar de los perros es apoyando a organizaciones que se dediquen a rescatar y rehabilitar perros en condición de calle o abandono, si piensas acoger a un compañero perruno infórmate, comprométete, adopta no compres y preferentemente esteriliza; recuerda que son seres sintientes, no objetos.
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