El terrible negocio del cautiverio de aves
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Quizá te hayas percatado que durante las vacaciones es común ver en redes sociales fotos de personas posando con animales en actividades como nado con delfines, montando elefantes o al lado de grandes felinos como tigres o leones, sin embargo lo que muchas personas no saben es la crueldad que se encuentra detrás de esa foto aparentemente feliz.
Uno de los países que ofrecen turismo con animales es Tailandia. De acuerdo a una publicación del periódico El Universal, en octubre de 2019, se menciona que en esta nación existen más de 10 mil elefantes en cautiverio, siendo explotados y usados por sus dueños como transporte para pasear a los turistas.
Otros de los animales que suelen ser explotados con fines lucrativos a nivel mundial son los cachorros de tigre y león, tortugas marinas y delfines, de acuerdo a información de la asociación World Animal Protection.
México no escapa de las estadísticas y también figura como uno de los destinos mundiales donde se ofrece turismo con animales. Lugares como Cancún y la Riviera Maya se destacan por promocionar el nado con delfines y fotos con animales silvestres, conviertiéndose en un negocio redituable y al mismo tiempo con muchas irregularidades.
En 2001, el reconocido fotógrafo de National Geographic, Steve Winter, denunció en su cuenta de Instagram el maltrato y explotación a los tenían sometidos a dos jaguares en Cancún. Winter publicó dos fotografías en las que se muestra a los felinos en el mar y rodeados de personas en motos acuáticas para ser fotografiados como parte de un tour pagado. Las imágenes causaron indignación en los cibernautas y aunque, en ese momento los jaguares fueron confiscados y reubicados, muchos otros ejemplares siguen siendo explotados de maneras similares.
Estos animales son sometidas a un maltraro constante, por ejemplo, a las aves suelen cortarles las plumas de las alas para evitar que vuelen, a algunos cachorros de felinos les cortan las garras para que no lastimen a los clientes; y se conoce que muchas veces los animales son sedados para una mayor manipulación durante la sesión fotográfica. Incluso, algunos animales son forzados de forma cruel a aprender rutinas para espectáculos de entretenimiento.
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